“Qué de mierda”: 54 kilos de basura menos en el río Gallo gracias al voluntariado ambiental
GuadaRed | MEDIOAMBIENTE
El pasado domingo 1 de junio, un grupo de vecinos y vecinas se reunió en Molina de Aragón con una misión sencilla pero contundente: limpiar el río Gallo. La convocatoria, impulsada por la Asociación Micorriza, congregó a personas de todas las edades decididas a liberar de basura un tramo de apenas 200 metros entre el puente Viejo y el de la Manola.
Lo que encontraron no dejó a nadie indiferente.
La última crecida del río había dejado al descubierto la miseria acumulada entre zarzas, piedras y raíces.
Plásticos, mascarillas, compresas, toallitas… restos del día a día que terminan asfixiando los cauces por donde aún corre algo de vida.
Según nos informan desde Micorriza, en apenas una hora y media de trabajo colectivo, se retiraron 54 kilos de residuos, una cifra que habla por sí sola. 
Lo que ocurrió ese día fue más bien una sacudida de conciencia
Pinzas en mano, bolsas abiertas, y un silencio entrecortado por risas, charlas, y el crujido de ramas bajo los pies. Incluso los más pequeños, como Marcos y Hugo, se metieron en el agua sin dudarlo. A ellos no les hizo falta que nadie les explicara por qué estaban allí.
El recuento fue tan real como necesario:
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Plásticos y envases: 10 kg
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Vidrio: 6,5 kg
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Residuos varios: 37,5 kg
Para rematar la jornada, se colocó un cartel con un lema creado por adolescentes de CEPAIM Molina de Aragón, directo, incómodo, necesario. Otros mensajes propuestos, más crudos aún, quedaron fuera por motivos evidentes. Pero todos compartían la misma intención: señalar la costumbre de mirar a otro lado mientras se envenena lo que nos sostiene.
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Desde Micorriza, agradecen a todas las personas que participaron —socias o no—, al Ayuntamiento de Molina de Aragón por el apoyo logístico, y a las compañeras y compañeros que hicieron posible la acción.
No fue una limpieza. Fue una declaración.








