La Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural apuesta por el futuro del sector agroalimentario con un presupuesto de 1.363 millones para 2026
La Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural ha consolidado su compromiso con el sector agroalimentario al anunciar un presupuesto de 1.363 millones de euros para el año 2026. Este presupuesto, que se sitúa como el tercero más alto del Gobierno regional, busca impulsar las políticas agrícolas y ganaderas y fomentar la sostenibilidad y la innovación dentro del sector.
En su comparecencia ante la Comisión de Presupuestos de las Cortes regionales, el consejero Julián Martínez Lizán destacó que este incremento será clave para hacer frente a los retos del sector, especialmente en lo que respecta a los seguros agrarios, la sanidad animal y las ayudas agroambientales.
Nuevas iniciativas y medidas para el desarrollo rural
Entre las nuevas medidas, destacan la creación de un Instrumento Financiero de Gestión Centralizada, diseñado para facilitar la concesión de aval y mejorar las explotaciones agrícolas y ganaderas. Este instrumento contará con un crédito de 5,7 millones de euros. Además, se ha previsto una línea de apoyo para la mejora de los caminos rurales, con una asignación de ocho millones de euros.
El presupuesto también incluye un aumento del 185% en la partida destinada a sanidad animal, alcanzando los 5,7 millones de euros, para abordar los desafíos derivados de las enfermedades animales y las sequías que afectaron al sector en 2025. En este sentido, el consejero resaltó que las circunstancias excepcionales vividas este año podrían repetirse en 2026, lo que hace necesario este refuerzo presupuestario.
Innovación y sostenibilidad como pilares de futuro
Uno de los puntos más destacados en esta planificación es la inversión en innovación agraria. Se destinarán seis millones de euros para el desarrollo de proyectos innovadores, los cuales se resolverán antes de finalizar el año y tendrán una segunda anualidad en 2027.
El presupuesto contempla subvenciones agroambientales para iniciativas relacionadas con la biodiversidad, como el fomento del girasol, las aromáticas y la apicultura para la biodiversidad, así como el apoyo a razas en peligro de extinción. Estas líneas de ayuda, que comenzaron este año, empezarán a abonarse en 2026.
La PAC y su impacto en el futuro del sector
En cuanto a la Política Agrícola Común (PAC), el consejero Martínez Lizán reafirmó el compromiso de su departamento de seguir pagando las ayudas directas a los agricultores y ganaderos en el primer día posible, garantizando que al menos un 70% de los pagos sean adelantados. Además, subrayó que el departamento continuará negociando la futura PAC para evitar recortes que afecten a las subvenciones directas y a las inversiones en la industria agroalimentaria, tanto en empresas privadas como en cooperativas.
Ejecución del presupuesto 2025: resultados positivos
El consejero también informó sobre la ejecución del presupuesto 2025, que está muy avanzada gracias a los pagos de la PAC. A fecha de 17 de noviembre, se ha ejecutado el 75,9% del presupuesto, con un total de 663,5 millones de euros entregados a los agricultores y ganaderos. En áreas clave como sanidad animal y seguros agrarios, la ejecución alcanza el 100%, garantizando así el pago de todas las ayudas, como las correspondientes a la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica y las ayudas por sequía.
En cuanto a las industrias agroalimentarias, el departamento ha realizado todos los pagos solicitados para el ejercicio FEAGA 2025 de las ayudas VINATÏ, con 62 proyectos aprobados y un presupuesto de 24 millones de euros, el doble que en 2024.
El presupuesto 2026 de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural refleja el compromiso del Gobierno regional con un sector clave para la economía. Las medidas anunciadas permitirán no solo hacer frente a los desafíos inmediatos, como la sequía o las enfermedades animales, sino también fomentar la innovación agraria, mejorar las infraestructuras rurales y garantizar la sostenibilidad del sector en el futuro.
Con este enfoque integral, la Consejería continúa trabajando para asegurar la competitividad del sector agroalimentario y la mejora de las condiciones de vida de los agricultores y ganaderos de la región.
