Luis Planas ha puesto de manifiesto que los focos han sido detectados y se han podido tomar “las medidas correspondientes” para “controlar esta enfermedad”.
Según su testimonio, es difícil saber cómo se ha producido el contagio, y ahora toca “completar una investigación” que será asumida por los servicios del Ministerio de Agricultura y de los gobiernos autonómicos, con quien su cartera colaborará para “intentar averiguar dónde se produjo el foco original”, toda vez que se trata de una enfermedad erradicada en 1968.
Tal y como ha aseverado, los controles de entrada de animales a territorio nacional “funcionan y son absolutamente adecuados” y con buen funcionamiento.
En todo caso, ha confirmado que hay “muchas hipótesis posibles”, y si bien ha evitado enunciar ninguna al no tener información “cierta al respecto”, las causas pueden ser “múltiples”.
“Lo que tenemos que hacer es evitar que se repita”.
Planas defiende que se ha conseguido limitar “al máximo” todos los efectos negativos de forma que no se pierde el estatus libre para la exportación.
“Espero que en cuanto la situación se normalice en los próximos días, en las próximas semanas, las pequeñas incidencias que hayamos podido tener, queden solucionadas”, ha rematado al respecto.
Ha hecho referencia a la “valiente novedosa” línea de ayudas por dos millones de euros para la reposición del ganado sacrificado. La primera vez, según ha apuntado, que se lleva a cabo una política de este tipo con una cuantía necesaria por el alto número de ganaderos afectados.
Luis Planas se ha mostrado confiado en que los gobiernos andaluz y castellanomanchego completen esta ayuda para hacer esta cuantía “suficiente”.