El Gobierno de Castilla-La Mancha valora la lavanda como motor de desarrollo sostenible, población y empleo.
GUADALAJARA EN FLOR: EL IMPACTO SOSTENIBLE DE LA LAVANDA
En una presentación liderada por el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Julián Martínez Lizán, el Gobierno Regional de Castilla-La Mancha ha resaltado el papel estratégico de la lavanda en el desarrollo sostenible de Guadalajara. Bajo el proyecto ‘La Lavanda, Esencia de un Cambio‘, promovido por la Federación de Asociaciones para el Desarrollo Territorial del Tajo-Tajuña (FADETA), se destaca el impacto económico, cultural y social del cultivo en la región.
La provincia de Guadalajara se erige como líder nacional en el cultivo de lavanda, con 2,940 hectáreas dedicadas a esta aromática planta, que contribuye a la lucha contra la despoblación y potencia el turismo. En total, más de 120 productores en 68 municipios, principalmente de Guadalajara, generan empleo para más de un millar de personas.
El proyecto audiovisual busca explorar y difundir la influencia del cultivo de lavanda en la provincia, con especial atención a la comarca de Brihuega. En la presentación, figuras destacadas como el delegado de la Junta en Guadalajara, José Luis Escudero, y el alcalde de Brihuega, Luis Manuel Viejo Esteban, resaltaron su importancia.
El consejero Martínez Lizán enfatizó la relevancia de la lavanda no solo como un recurso económico, sino también como un instrumento para combatir la despoblación. Destacó la iniciativa del presidente de Castilla-La Mancha, que realizó gestiones “contundentes” en Bruselas para excluir los aceites esenciales de lavanda y lavandín de la lista de productos químicos.
En términos de extensión, Guadalajara y sus municipios de la comarca de La Alcarria ocupan una de las mayores superficies nacionales dedicadas al cultivo de lavanda, consolidándose como uno de los principales productores del país. La producción de biomasa y aceite de lavandas en la comarca de FADETA representa la mitad de la provincia y un tercio de la región.
Desde una perspectiva de rentabilidad y sostenibilidad, Martínez Lizán subraya la superioridad de la lavanda en comparación con otras alternativas agrícolas. Destaca su contribución a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) al ser un cultivo responsable con el medio ambiente.
El consejero reconoce el trabajo de Grupos de Desarrollo Rural como FADETA, que han recibido 176 millones de euros para proyectos que fortalecen la región. Proyectos como la destilería de plantas aromáticas en Brihuega no solo generan nuevas actividades económicas sino que también contribuyen a mantener el tejido socioeconómico de la región.
Fuente: JCCM (Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha)