Estas ayudas, gestionadas entre mayo de 2022 y diciembre de 2024, han supuesto un apoyo sin precedentes al sector agrario, reforzando su sostenibilidad y viabilidad en tiempos de crisis.
Finalizan los pagos de ayudas extraordinarias a agricultores y ganaderos por la guerra en Ucrania y la sequía
26 de diciembre de 2024
El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) ha culminado el proceso de pago de las ayudas extraordinarias dirigidas a agricultores y ganaderos afectados por la guerra en Ucrania y la sequía, con un desembolso total de 1.364,9 millones de euros.
El último pago realizado corresponde a la línea destinada a frutales y frutos de cáscara, beneficiando a 71.011 agricultores con un importe de 82,24 millones de euros. Este cierre marca el final de un esfuerzo financiero que ha llegado al 98,7 % de los 1.382,35 millones de euros presupuestados, consolidando una acción eficaz y coordinada en beneficio del sector primario.
Ayudas gestionadas a través del FEGA
De las siete líneas de ayudas habilitadas, cinco fueron gestionadas por el Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA), que tramitó el 85 % del importe total. Este organismo autónomo del MAPA procesó las ayudas de oficio, utilizando datos de superficies y animales contemplados en la Política Agraria Común (PAC), sin necesidad de que los beneficiarios presentaran solicitudes. Esta automatización en la gestión ha permitido una mayor rapidez y eficacia en la distribución de los fondos.
El 90 % del presupuesto destinado a estas ayudas provino de los Presupuestos Generales del Estado, mientras que el 10 % restante fue financiado mediante la reserva de crisis agrícola de la Unión Europea. Este respaldo financiero es un ejemplo destacado de la colaboración entre administraciones nacionales y comunitarias en situaciones de crisis, demostrando una sólida capacidad de respuesta frente a retos imprevistos.
Beneficiarios y distribución geográfica
Las ayudas han alcanzado a un total de 659.490 agricultores y ganaderos en toda España, reflejando un impacto significativo en todo el territorio. Las comunidades autónomas con mayor número de beneficiarios han sido Andalucía, Castilla y León y Castilla-La Mancha. Los sectores agrarios que recibieron mayores importes incluyen la ganadería, los fertilizantes y los frutales, sectores esenciales para la economía rural.
Beneficiarios por línea de ayuda
Según las tablas proporcionadas, los beneficiarios de las ayudas se distribuyen de la siguiente forma por tipo de línea:
- Ganadería: Este sector recibió el mayor número de ayudas, reflejando su papel clave en la producción agroalimentaria.
- Fertilizantes: Con una elevada proporción de beneficiarios, estas ayudas han contribuido a mitigar el impacto del incremento de los costos en los insumos agrícolas.
- Frutales y frutos de cáscara: La última línea en cerrarse destacó por su importancia en regiones mediterráneas y zonas de cultivo extensivo.
Importes por comunidades autónomas
En cuanto a la distribución por comunidades autónomas:
- Andalucía: 230,4 millones de euros distribuidos entre agricultores y ganaderos, liderando el volumen total de ayudas recibidas.
- Castilla y León: 204,9 millones de euros, destacando el apoyo a la ganadería y a los cultivos herbáceos.
- Castilla-La Mancha: 189,4 millones de euros, con un enfoque significativo en cultivos de secano y ganadería extensiva.
Las tablas de distribución muestran que otras comunidades también han recibido importes relevantes, reflejando una cobertura amplia y equilibrada en todo el país.
Transparencia y recursos adicionales
El proceso de tramitación de recursos de alzada sigue activo para aquellos beneficiarios que han presentado reclamaciones. Además, el MAPA ha habilitado un portal web en el sitio del FEGA donde se puede consultar información desglosada sobre importes pagados y número de beneficiarios por provincias y comunidades autónomas. Este recurso busca garantizar la transparencia y accesibilidad a la información para todos los interesados.
Fuente: Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación
Estas ayudas reflejan el compromiso del Gobierno y de la Unión Europea con el sector agrario, en un contexto marcado por retos climáticos y geopolíticos que han puesto a prueba la sostenibilidad de las explotaciones agrarias en España. La finalización de estos pagos simboliza una respuesta institucional ante la adversidad, reforzando las bases para un futuro más resiliente en el campo español.