Detenidos en Canales de Molina dos cazadores furtivos tras huir de la Guardia Civil
Canales de Molina, 25 de marzo de 2025
La Guardia Civil de Guadalajara ha detenido en Canales de Molina a dos varones, de 51 y 25 años y residentes en la provincia de Toledo, como presuntos autores de un delito contra la flora y fauna y otro de desobediencia grave a agentes de la autoridad.
Detenidas dos personas 👥⛓️💥 en #CanalesdeMolina por caza furtiva 🦌
👉En el momento de la detención se les intervino una cabeza de un corzo 🦌 un rifle, un visor térmico, dos armas blancas y munición.
👉También se les imputa un delito de desobediencia al darse a la fuga 🚙💨 pic.twitter.com/lr7NzHg3rk
— Guardia Civil Guadalajara (@GuardiaCivilGU) March 25, 2025
Una persecución tras sospechas de caza furtiva
Los hechos ocurrieron en la madrugada del jueves cuando una patrulla de la Guardia Civil de Molina de Aragón, que prestaba servicio en la carretera N-211 a la altura del kilómetro 37 en el término municipal de Selas, detectó un vehículo circulando de manera irregular, frenando y acelerando en repetidas ocasiones.
Ante esta situación sospechosa, los agentes intentaron detener el vehículo para identificar a sus ocupantes. Sin embargo, el conductor hizo caso omiso a las señales de alto, aceleró bruscamente y se dio a la fuga, iniciándose una persecución que culminó en Canales de Molina.
Huida a pie y detención en el campo
Una vez interceptado el vehículo, el conductor permaneció en el coche, pero su acompañante salió huyendo campo a través, intentando evitar su detención. Sin embargo, apenas una hora después, otra patrulla de la Guardia Civil de Trillo logró localizarlo escondido entre unos arbustos, tumbado en el suelo en un intento fallido de pasar desapercibido.
En el momento de su detención, los agentes encontraron en su poder un rifle con visor térmico, dos mochilas que contenían un cuchillo, una navaja con restos de pelos y sangre, munición de rifle y la cabeza de un corzo, confirmando así las sospechas de caza furtiva en la zona.
Investigación y pruebas forenses
Tras la detención, la Guardia Civil procedió a la instrucción de diligencias, poniendo a los dos detenidos a disposición del Juzgado de Instrucción de Molina de Aragón. Paralelamente, el Equipo del SEPRONA de Guadalajara tomó muestras de ADN de los restos del animal cazado y del cuchillo utilizado, enviándolas al Departamento de Medio Ambiente del Servicio de Criminalística de la Dirección General de la Guardia Civil para su análisis forense.
Con esta operación, la Guardia Civil de Guadalajara reafirma su compromiso con la protección del medio ambiente y la lucha contra la caza furtiva, una práctica ilegal que amenaza la fauna salvaje y el equilibrio ecológico en la provincia. Gracias a la rápida intervención de los agentes, se ha logrado detener a estos cazadores furtivos y evitar que sigan actuando en la zona.
La Asociación de Titulares de Cotos de Caza de Guadalajara (ATICA GUADALAJARA), nos recuerda las consecuencias del furtivismo para la biodiversidad y la caza legal.
El impacto de la caza furtiva en la región va más allá del daño inmediato a las especies afectadas. Esta práctica ilegal pone en riesgo el equilibrio ecológico, la sostenibilidad de los recursos naturales y la legitimidad de la caza regulada.
Efectos negativos sobre la caza legal y el medio ambiente:
- Daño a la reputación de la caza legal: El furtivismo genera una percepción negativa sobre la actividad cinegética, perjudicando a los cazadores que respetan la normativa y practican una caza sostenible.
- Desestabilización de los ecosistemas: Al ignorar cupos, especies protegidas y épocas de veda, los cazadores furtivos rompen el equilibrio poblacional y ponen en peligro la biodiversidad de la región.
- Competencia desleal: Los furtivos operan al margen de la ley, evitando el pago de licencias y permisos, lo que crea una desventaja económica para los cazadores legales.
- Reducción de ingresos locales: La caza regulada contribuye al desarrollo económico mediante tasas, permisos y turismo cinegético. Por el contrario, la caza furtiva no solo no aporta ingresos, sino que también reduce el atractivo de las actividades legales.
- Riesgo de extinción de especies: Los furtivos cazan de manera indiscriminada, poniendo en peligro especies clave para el ecosistema y la práctica cinegética sostenible.
Interferencias en la gestión y conflictos sociales
“El furtivismo también dificulta los esfuerzos de gestión poblacional de la fauna silvestre, que se basan en estudios científicos para garantizar la sostenibilidad. Al alterar las cifras y los datos sobre las poblaciones animales, estas actividades ilegales complican la planificación de las autoridades y los gestores de cotos de caza”. sentencia Francisco Plaza Presidente de ATICA Guadalajara.
“Además, la presencia de cazadores furtivos genera tensiones en los pueblos, donde interactúan propietarios de terrenos, cazadores legales, agentes forestales y otros actores del medio ambiente. En algunos casos, estos conflictos pueden derivar en problemas legales para los propietarios de cotos, quienes pueden enfrentarse a sanciones o la pérdida de licencias si se detectan actividades furtivas en sus terrenos”.
Incremento de los costes de vigilancia y riesgos para la seguridad
El combate contra el furtivismo implica un despliegue significativo de recursos por parte de las autoridades, tanto en términos económicos como humanos.
La vigilancia intensiva, los controles y las investigaciones generan costes que podrían dedicarse a otras áreas de gestión cinegética y conservación.
“Por otro lado, los furtivos suelen operar de manera clandestina, sin respetar las medidas de seguridad básicas. Esto supone un riesgo no solo para ellos mismos, sino también para cazadores legales, guardias forestales y personas que transitan por las áreas rurales”.
El compromiso de ATICA Guadalajara con el SEPRONA
“Desde ATICA Guadalajara, queremos resaltar y apoyar el valioso trabajo del SEPRONA de la Guardia Civil en su firme compromiso con la lucha contra el furtivismo y la protección del patrimonio natural. Aplaudimos las intervenciones que no solo buscan sancionar las actividades ilegales, sino también sensibilizar a la ciudadanía sobre la importancia de respetar la normativa cinegética, lo que es fundamental para garantizar un futuro sostenible para nuestros recursos naturales”.
Desde la Asociación de Titulares de Cotos de Caza de Guadalajara (ATICA Guadalajara) comentan, “la caza legal es una herramienta clave para el equilibrio ecológico y el desarrollo económico local, pero debe practicarse bajo un estricto respeto a las leyes y a las buenas prácticas”.
GuadaRed, periódico de noticias y actualidad de la provincia de Guadalajara, recomienda a sus lectores colaborar activamente en la protección de nuestros ecosistemas. Denunciar actividades ilegales es clave para preservar la biodiversidad de la comarca de Molina de Aragón. El SEPRONA continúa siendo un referente en la lucha contra el furtivismo, protegiendo el medio natural y asegurando el equilibrio ecológico de nuestra región.
