Dato mata relato
Guadalajara, a 2 de enero de 2025
Guadalajara es una ciudad con alma de pueblo, una realidad que nos hace más especiales y singulares, si cabe. Hay quien sigue pensando que señalar a sus vecinos metidos en política hará que se acobarden, y hasta hace unos años era así. La izquierda estaba acostumbrada a usar el comodín del racismo, el machismo o la homofobia para ganar cualquier batalla al disidente. Sin embargo, con VOX han pinchado en hueso.
Todo lo que defendemos son opiniones extrapolables y homologables en cualquier país civilizado de nuestro entorno. Además, absolutamente cada cifra que ofrecemos en nuestros argumentos está basada en datos obtenidos de fuentes oficiales de fácil acceso.
En el último mes, me he encontrado con varios políticos y periodistas que, al escucharnos ofrecer datos, han preguntado: “¿Y eso de dónde sale?” Quizá esperaban que respondiéramos que de la ciencia infusa. Nada más lejos de la realidad. Al escuchar “Ministerio de Igualdad”, “Interior” o “INE” como fuente de los datos, no pude evitar esbozar una sonrisa al ver sus rostros cortocircuitar ante la cruda realidad.
Cuando digo que en 2023 el 30,6 % de los delitos en nuestra provincia fueron cometidos por extranjeros, solo estoy haciendo públicos unos datos a los que cualquier guadalajareño tiene acceso. Si añado que el 16,5 % de la población de nuestra provincia es extranjera, basta con acudir al INE para comprobarlo. Así que, cuando afirmo que, en Guadalajara, los extranjeros delinquen el doble que los nacionales, no es una “inventada”, como diría el autócrata Sánchez. Si las matemáticas son racistas, culpen a Pitágoras, no a quien las utiliza.
También en nuestra provincia, los delitos contra la libertad sexual han aumentado un 11,9 % en los últimos doce meses. Lo que también ha crecido en ese periodo de tiempo es la población, que ha pasado de 278.891 a 283.694 habitantes. De esos 4.803 nuevos guadalajareños, 2.583 eran extranjeros, lo que supone un 52,8 % del total.
Por no hablar de las mujeres asesinadas a manos de sus parejas en 2024 en nuestro país. La única noticia positiva es que la cifra se ha reducido de 58 a 47. Siguen siendo 47 más de las que debieran ser. Insisten en llamarnos negacionistas de la violencia contra la mujer como único argumento sólido en los debates. Nadie niega que sea un problema real; lo que sí negamos son las causas y soluciones que proponen desde el consenso progre.
Guadalajara
Hay un dato que resulta demoledor: de esas 47 mujeres asesinadas este año por hombres despreciables, el 37 % han sido asesinadas por extranjeros. Teniendo en cuenta que, a 1 de octubre, los extranjeros residentes en nuestro país eran el 13,8 % de la población, basta con sacar la proporción para ver que algo no cuadra. Y no incluyen en las estadísticas casos como el último del año, en el que el asesino era nacionalizado.
¿Quiere decir esto que todos los inmigrantes son delincuentes en potencia? Rotundamente no. Lo que pedimos es un control más exhaustivo de quién accede a nuestro país, además de priorizar la inmigración procedente de lugares culturalmente equiparables a nuestra forma de vida. No podemos seguir permitiendo la entrada descontrolada de ilegales procedentes de países donde la mujer se considera un ser inferior en derechos al hombre. Y en VOX no vamos a parar de repetirlo, sin miedo a nada ni a nadie.