La Consejería de Desarrollo Sostenible de Castilla-La Mancha ha anunciado una nueva resolución que prohíbe la realización de labores agrícolas, forestales y apícolas en las zonas donde el índice de propagación potencial de incendios (IPP) sea extremo.
La medida contempla evitar estos trabajos en lugares donde el riesgo sea muy alto durante las horas de mayor calor, de 15:00 a 18:00.
A partir del 2 de mayo, la resolución se publicará en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha y se facilitará información sobre el IPP por municipios, en lugar de solo por ámbito comarcal como hasta ahora.
La medida ha sido desarrollada de forma consensuada con representantes de los sectores agrícolas y forestales, incluyendo Asaja, UPA y COAG, así como de la Asociación de cosechadores (Apema).
El Consejero de Desarrollo Sostenible, José Luis Escudero, ha destacado que esta resolución es un “hito histórico” ya que es la primera vez que se llega a un acuerdo entre la Administración y los sectores afectados en Castilla-La Mancha y probablemente en toda España .
Las labores agrícolas, forestales y apícolas son actividades que pueden aumentar el riesgo de incendios forestales debido al uso de maquinaria y al contacto con elementos que pueden generar chispas.
Con esta medida, se busca reducir la probabilidad de incendios en la región, especialmente en épocas de mayor calor y sequía.
Esta decisión se enmarca en la política de prevención de incendios forestales de Castilla-La Mancha, que busca proteger y conservar el patrimonio natural de la región, así como garantizar la seguridad de sus habitantes.
La región cuenta con una importante superficie forestal y sufre periódicamente la amenaza de los incendios forestales, por lo que es importante adoptar medidas preventivas y de protección.