La capacidad de pensamiento crítico en futuros médicos, amenazada por la dependencia de la IA generativa

10 de diciembre de 2025 | GuadaredSalud

Un reciente editorial publicado por expertos de la Universidad de Missouri (EEUU) en la revista BMJ Evidence Based Medicine alerta sobre los riesgos que implica una dependencia excesiva de la inteligencia artificial generativa en la formación de nuevos médicos. Según los especialistas, esta tendencia podría debilitar la capacidad de pensamiento crítico de los estudiantes de medicina y médicos recién graduados, afectando directamente su desempeño clínico y la calidad de la atención médica.

El documento destaca que la utilización intensiva de herramientas de inteligencia artificial puede reforzar sesgos existentes en los datos, generar inequidad y provocar “alucinaciones” en forma de información aparentemente coherente pero incorrecta. Entre los problemas más preocupantes identificados se encuentran:

• Sesgo de automatización: confianza excesiva en los resultados generados por sistemas automatizados.

  

• Descarga cognitiva: externalización del razonamiento y la memoria a la IA, disminuyendo la retención y el análisis crítico.

• Debilitamiento de habilidades: especialmente crítico en estudiantes y recién graduados que aún desarrollan competencias esenciales.

Los autores subrayan que estos factores representan serios riesgos médicos, ya que un pensamiento crítico deficiente puede afectar la toma de decisiones clínicas y la seguridad del paciente. Para mitigar estos peligros, recomiendan a los educadores médicos implementar cambios en la formación, como evaluaciones basadas en procesos y no solo en resultados finales, además de exámenes supervisados que excluyan el uso de IA, especialmente en habilidades prácticas como comunicación junto al paciente, examen físico y trabajo en equipo.

Enfatizan la importancia de que los médicos en formación comprendan los principios de la inteligencia artificial, sus fortalezas, debilidades y posibles sesgos, así como los contextos clínicos en los que su uso puede ser seguro y efectivo. Los expertos instan a reguladores, sociedades profesionales y asociaciones educativas a desarrollar y actualizar directrices sobre el impacto de la IA en la educación médica, asegurando que la integración tecnológica no comprometa la capacidad de pensamiento crítico ni la calidad de la atención médica.

La dependencia excesiva de la inteligencia artificial generativa representa un desafío creciente para la formación médica, y la vigilancia activa de educadores y reguladores es clave para preservar habilidades críticas y reducir los riesgos médicos asociados.