Denuncian el mal estado del servicio municipal de grúa en Guadalajara: problemas con vehículos, cobros y condiciones laborales
El grupo municipal AIKE ha denunciado este jueves las graves deficiencias que atraviesa el servicio municipal de grúa en Guadalajara, una situación que persiste a pesar de la reciente adjudicación de la gestión a una nueva empresa tras más de dos años sin contrato en vigor. La concejala Susana Martínez, acompañada de varios miembros del grupo, se ha pronunciado sobre los serios problemas que afectan tanto a la operativa diaria como a la atención a los ciudadanos.
La grúa municipal debería ser un servicio esencial para garantizar la fluidez del tráfico y la seguridad en las calles de la ciudad, pero actualmente el único vehículo disponible está averiado desde el martes. Según Martínez, este vehículo se encuentra en el taller y, además, carece de la ITV en vigor, lo que pone de manifiesto la falta de mantenimiento y la incapacidad para prestar un servicio adecuado. En este momento, el servicio solo cuenta con dos cepos inmovilizadores, lo que limita su capacidad para retirar vehículos de forma eficiente y pone en evidencia las deficiencias del sistema.
Otro de los puntos críticos mencionados por AIKE es la falta de medios para el cobro de las tasas correspondientes. Durante la mañana de este jueves, se ha constatado que el datafono habitual ha sido retirado del depósito municipal, sin que se haya habilitado una alternativa de pago clara. Esto ha causado inconvenientes a varios ciudadanos, que se han visto obligados a desplazarse entre diferentes dependencias municipales para poder abonar las tasas del servicio.
Desde AIKE, se ha señalado también la falta de responsabilidad por parte del concejal de Seguridad, José María Antón, y de la empresa adjudicataria, a quienes acusan de abandonar a los trabajadores del servicio y de no coordinarse adecuadamente para solucionar los problemas. Francisco Corral, trabajador del servicio de grúa, ha lamentado las condiciones precarias en las que el equipo se ve obligado a trabajar, destacando las constantes averías de los vehículos, la falta de material y la ausencia de un vestuario adecuado para los operarios. Además, recordó el incidente de un atropello ocurrido recientemente en el depósito por parte de una persona que intentaba recuperar su vehículo, lo que pone en evidencia la inseguridad en las instalaciones.
La situación ha sido calificada por AIKE como una muestra de abandono e improvisación por parte de las autoridades locales, que están afectando tanto a los ciudadanos como a los trabajadores y a la propia Policía Local, que se encuentra sin los recursos suficientes para atender incidencias de tráfico y situaciones urgentes.








