Los corredores de Guadalajara se encomiendan al capote milagroso en los Sanfermines 2025
Cada mañana en Pamplona, cuando apenas amanece y la ciudad despierta al sonido de los adoquines bajo los pasos de los corredores, los mozos de la provincia de Guadalajara se mezclan con la multitud en la cuesta de Santo Domingo. Allí, como manda la costumbre, alzan la voz para pedir protección a San Fermín:
“A San Fermín pedimos, por ser nuestro patrón, nos guíe en el encierro dándonos su bendición.”
Con la mirada fija en la hornacina y el pequeño capote rojo que cubre al santo, los corredores buscan un poco de suerte y amparo antes de enfrentarse a una carrera que puede cambiarlo todo en cuestión de segundos.
Entre la emoción, el respeto y la adrenalina, los mozos de Guadalajara, veteranos de plazas y capeas, acuden a los Sanfermines movidos por una pasión que no se explica, solo se siente.
Cuando el reloj marca las ocho y suena el primer cohete, los toros irrumpen en las calles, y con ellos, los nervios, los miedos y el deseo de salir indemnes.
César García Navarro: un corredor de raza
Entre los protagonistas de los Sanfermines 2025 destaca César García Navarro, natural de Yunquera de Henares (Guadalajara). Con 49 años y muchos encierros a sus espaldas, este informático de profesión y recortador de corazón representa el espíritu de la fiesta en estado puro.
A César le sobra valor, pero también conoce bien sus propias limitaciones: desde pequeño tiene una pérdida parcial de visión en un ojo, tras un accidente fortuito con un bolígrafo. Aun así, nunca ha dejado que esa circunstancia le aparte de su pasión. Corre “viendo sombras”, girando la cabeza continuamente para no perder de vista a los astados, confiando en su instinto y en la experiencia que le han dado los años.
Vestido siempre con su característica camiseta azul marino y el número 8 a la espalda, ha llegado a participar en más de cien encierros en una sola temporada. Aunque hoy reduce algo el ritmo, sigue corriendo en más de 70 citas al año, tanto en encierros populares como en el campo bravo.
El día que César salvó una vida
La historia de César no se entiende solo por su carrera ante los toros.
A los 33 años, en un encierro marcado por el peligro, arriesgó su propia vida para salvar a otro corredor: Pello Torreblanca Lafraya, un abogado navarro que quedó atrapado en las astas del toro Ermitaño.
Sin pensarlo, César se lanzó a ayudarle, logrando apartarlo de la trayectoria del toro y permitiendo que pudiera ser atendido. Años después, cuando Pello salió del hospital, quiso agradecer aquel gesto en las páginas del Diario de Navarra:
“En especial, he de concretar mi gratitud en el mozo que, finalmente, consiguió agarrarme del brazo, jugándose su vida, y alejarme de un fin terrenal, facilitándome poder seguir viendo crecer a mis tres hijos. No tengo el gusto de conocerlo (lo he intentado hacer por internet en vano), tan solo conozco su nombre y apellidos: César García Navarro, corredor de Guadalajara. Eskerrik asko, César.”
El propio Pello también recordó con detalle el momento en que fue rescatado:
“Vino un chico, con un niki azul marino, que después me he enterado que se llama César, y me arrastró. No le conozco de nada, ni me enteré en su momento de lo que había hecho, pero le estoy profundamente agradecido.”
Gestos como el de César recuerdan que, en los encierros, el valor no se mide solo por correr, sino por saber ayudar cuando alguien está en peligro.
Un encierro más para la memoria
En el encierro de este año, con toros de Cebada Gago, César volvió a demostrar su experiencia y serenidad. Junto a otros corredores veteranos, ayudó a guiar a un toro rezagado, conocido como Caminante, evitando que se generara una situación peligrosa en la recta final.
Lo hizo, como siempre, a pesar de las adversidades: con apenas un 30% de visión en un ojo, las rodillas castigadas por 17 operaciones y una reciente rotura de fibras. Porque para quienes sienten de verdad los Sanfermines, ninguna dificultad física es excusa para renunciar a vivir el encierro.
Fe, superstición y un capote que protege
Cada jornada, minutos antes de que arranque la carrera, los corredores se agrupan ante la imagen de San Fermín. Desde 2009, el cántico se entona también en euskera:
“Entzun arren San Fermín
zu zaitugu patroi
zuzendu gure oinarrak
entzierru hontan otoi.”
Después, el grito de “¡Viva San Fermín! ¡Gora San Fermín!” resuena en las calles. Ese pequeño capote rojo que cubre al santo simboliza la ayuda que muchos confían recibir cuando el peligro acecha. De ahí viene también la expresión “echar un capote”, que en los encierros, literal o figuradamente, salva vidas.
Nueve claves para correr un encierro
El encierro de Pamplona no es una aventura cualquiera. Quien decide correr debe hacerlo con responsabilidad. Estas son algunas cosas básicas que todo corredor debería saber:
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Infórmate: conoce las normas y la historia.
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Prepárate físicamente: no improvises.
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No quieras hacerlo todo: elige bien tu tramo.
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Ojo con los demás: los corredores también pueden ser un peligro.
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Corre de verdad: si entras, no te pares.
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Los toros no avisan: mantén la concentración.
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Acepta el riesgo: cada encierro deja heridos.
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Las tragedias existen: no olvides que ha habido muertes.
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Puede ser la primera y última vez: muchos no repiten.
Hemingway, Pamplona y el eco universal
Los Sanfermines no serían lo que son sin la huella de Ernest Hemingway, que llevó al mundo la imagen de Pamplona y su encierro en su novela Fiesta. A día de hoy, miles de personas de todos los países viajan a Navarra movidas por aquella fascinación literaria.
Guadalajara en Pamplona: pasión sin fronteras
La presencia de los mozos de Guadalajara en los Sanfermines 2025 demuestra que la pasión por el toro no entiende de lugares. Son ellos, junto a corredores de todo el mundo, los que cada día mantienen viva la llama de una tradición que sigue latiendo en las calles de Pamplona.
Al final, los Sanfermines son mucho más que velocidad y valentía: son una celebración de la vida, de la emoción y de esos instantes que se convierten en leyenda. Y a veces, cuando menos se espera, ese “capote milagroso” aparece para recordarnos que incluso en el encierro más temido todo puede terminar bien.
Ayer mismo, en este escenario de pasión y tradición, el Ayuntamiento de Guadalajara presentó en Pamplona el nuevo recorrido de los encierros 2025, unos esperados encierros por el centro de la capital, además del cartel oficial de estos, dentro de un ambicioso plan para lograr la distinción de Fiesta de Interés Turístico Nacional. Desde Tercio de Quites seguimos acercándote la actualidad taurina que late en cada carrera y en cada suspiro ante el toro.
Así será el nuevo recorrido de los encierros de Guadalajara: desde el Mercado hasta Santo Domingo
