El 31-31 final no solo fue un marcador, sino un grito de esperanza, una demostración de que este equipo no se rinde, que sigue vivo en la Liga Plenitude, con el corazón latiendo fuerte gracias a su gente.

Una remontada para creer: el IMPULSE BM Guadalajara araña un punto de oro en un Santamaría que fue una fiesta

En una noche para el recuerdo, el IMPULSE BM Guadalajara firmó un empate heroico ante un rival de altura, el Viveros Herol BM Nava, en un Polideportivo David Santamaría convertido en un hervidero de ilusión, lucha y pasión por el balonmano.

La jornada 28 no era un partido más. Era una final anticipada, una de las tres últimas balas que los de Juan Carlos Requena tenían en el cargador para aferrarse a la categoría. Con varias bajas importantes —entre ellas, la del extremo José Luis Román—, el equipo saltaba a la pista cargado de fe y de ganas. La grada, con más de 1.400 almas empujando, se encargó de marcar el ritmo desde el minuto uno.

Y no fue fácil.

BM Nava, con un plantel experimentado y jugadores de enorme calidad como Tioumentsev, Mario Nevado y Pancho Ahumada, mostró desde el inicio que venía dispuesto a llevarse los dos puntos.

Aprovechando algunos errores locales y la efectividad en el lanzamiento, los naveros se ponían por delante en los primeros parciales (3-5, 5-7).

El calor agobiante en el pabellón no ayudaba, pero el espíritu alcarreño no se apagaba.

Con el paso de los minutos, la figura de Panchito Lombardi emergía como faro del equipo. Goleador, asistente, líder. El argentino se echó el partido a la espalda, respaldado por el buen hacer de Haitz Gorostidi, Sladkowski, y el incansable Mielczarski, que volvió a ser uno de los máximos anotadores. Aun así, al descanso el marcador reflejaba un complicado 15-18.

Un segundo tiempo de locura y orgullo

Tras el paso por vestuarios, el partido entró en una fase de vértigo. Las pérdidas de balón y el ritmo frenético marcaron el arranque de la segunda parte. BM Nava seguía castigando cada error local, y su portería, ahora defendida por Luis de Vega, se hacía infranqueable por momentos. El marcador se ponía cuesta arriba (17-20), pero nadie bajaba los brazos.

Ahí apareció Nico García, que se agigantó en la portería morada. Sus intervenciones dieron alas al equipo, que comenzó a crecer en confianza y acierto. Goles de Óscar Moreno, un misil de Sladkowski a portería vacía y otro tanto de Juan Jodar colocaban el empate a 20. El Santamaría estallaba. El público se levantaba. Y se escuchaba fuerte: “¡Sí se puede!”

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Los minutos finales fueron puro drama. BM Nava intentaba cerrar el partido, volviendo a ponerse tres goles arriba (27-30), aprovechando algunos errores locales y decisiones arbitrales muy protestadas por el banquillo alcarreño. Pero este equipo ha aprendido a sufrir. Ha aprendido a no rendirse.

El gol del alma

Con dos minutos por jugar y un 28-31 adverso, Requena pedía un último tiempo muerto. Era ahora o nunca. Lo que vino después fue una tormenta morada. Gol de Serradilla, robo en defensa, otro tanto de Catalina, y, como colofón, el alma de un equipo entera condensada en una jugada: Panchito Lombardi, entre lágrimas y rabia, rompía la red para poner el 31-31. La grada se venía abajo. El empate sabía a gloria.

Este punto, peleado hasta la extenuación, puede ser la chispa que encienda el motor de la permanencia. Porque si algo quedó claro es que el IMPULSE BM Guadalajara tiene equipo, tiene entrenador, y sobre todo tiene una afición que no le va a dejar solo.

El Santamaría no entiende de imposibles

Con este resultado, los alcarreños siguen vivos en la lucha por seguir en la Liga Plenitude, y afrontan las dos jornadas que restan con el alma en vilo, pero con la fe intacta. Porque cuando un equipo juega con el corazón en la mano y una ciudad entera empuja, cualquier cosa puede pasar.

La historia aún no está escrita. Y Guadalajara quiere escribirla en morado.

Ficha técnica

IMPULSE BM GUADALAJARA 31 (15+16)

Gerard Forns (Nico García), Juan Jodar (2), Manu Catalina (2), Jakub Sladkowski (3), Miguel Llorens, Haitz Gorostidi (5), Panchito Lombardi (5) -siete inicial-; Santi Simón (1), Piotr Mielczarski (8), Vicente Poveda (1), Jesús Arribas, Nemanja Jović (1), Óscar Moreno (1), Alberto Serradilla (1), Marcos Dorado (1).

VIVEROS HEROL BM NAVA 31 (18+13)

Mateus Cristian (Luis de Vega), Tioumentsev (8), Gedeón Guardiola, Alfredo Otero, Mario Nevado (8), Pancho Ahumada (7), Nico Bonanno (1) -siete inicial-; Isaías Guardiola (3), Daniel Pérez (2), Lautaro Robledo (1), Gonzalo Carró, Óscar Marugán, Yeray Lamariano, Pablo Herranz (1).

Árbitros:

José Carlos Friera Cavada y Andrés Rosendo López. Excluyeron a Panchito Lombardi y Marcos Dorado (Guadalajara), y a Daniel Pérez, Gedeón Guardiola y Nico Bonanno (Nava).