El Gobierno de Castilla-La Mancha invierte 13 millones de euros para conectar los centros sanitarios de Cuenca y Guadalajara a redes de calor basadas en biomasa, impulsando la descarbonización y reduciendo las emisiones de CO2.
Castilla-La Mancha da un paso clave en la descarbonización de sus centros sanitarios con la conexión a redes de calor de biomasa
El Gobierno regional ha confirmado una importante inversión en la transición hacia energías más sostenibles con el objetivo de descarbonizar los centros sanitarios de Cuenca y Guadalajara. El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha ha aprobado un contrato de cerca de 13 millones de euros para conectar estos centros sanitarios a redes de calor basadas en biomasa. Esta iniciativa se enmarca dentro de la estrategia del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM) para reducir las emisiones contaminantes y avanzar en la sostenibilidad energética del sistema sanitario de la región.

La consejera Portavoz del Ejecutivo regional, Esther Padilla, detalló en rueda de prensa que este contrato tiene como objetivo suministrar energía térmica a diversos centros de salud y hospitales de Cuenca y Guadalajara mediante redes de calor centralizadas. Estas redes producen energía térmica a partir de la biomasa, contribuyendo así a la reducción de gases contaminantes derivados de la combustión de productos fósiles, como el gasóleo y el gas natural.
Centros afectados y ejecución del proyecto
En Guadalajara, los hospitales y centros de salud que se beneficiarán de esta conexión a las redes de calor son el Hospital Universitario, el Instituto de Enfermedades Neurológicas y los centros de salud de El Balconcillo y El Ferial. En Cuenca, el Hospital Virgen de la Luz, el nuevo Hospital Universitario de Cuenca, el Centro de Especialidades y varios centros de salud también se verán integrados en esta red.
La ejecución del contrato tiene un plazo de 48 meses, comenzando el 1 de mayo de 2025. A lo largo de este periodo, se realizarán las conexiones necesarias para integrar estas instalaciones a las redes de calor locales, asegurando una transición energética eficaz y sostenible para los centros sanitarios de ambas provincias.
La biomasa como alternativa a los combustibles fósiles
Hasta ahora, los centros sanitarios de estas ciudades generaban su propia energía térmica mediante sistemas individuales de combustión de gasóleo o gas natural. Sin embargo, con la adopción de este sistema de district heating (calefacción distrital), se busca eliminar la dependencia de los combustibles fósiles y reducir el impacto ambiental. La biomasa será la fuente principal de energía, calentando el agua a través de la combustión de residuos forestales locales, los cuales se distribuyen mediante una red de tuberías.
Esther Padilla explicó que, a través de esta tecnología, se evitaría la emisión de unas 7.291 toneladas de CO2 al año, lo que equivale al ahorro de tres millones de litros de gasolina. Este modelo, además de ser más limpio y sostenible, también promueve una economía de proximidad, ya que se utiliza biomasa proveniente de la limpieza y desbroce de las masas forestales cercanas.
Compromiso con la sostenibilidad y la descarbonización
El SESCAM demuestra con esta iniciativa su firme compromiso con la descarbonización y con la mejora de la calidad integral de los suministros energéticos en sus instalaciones. Según Padilla, esta es una muestra más del compromiso del Gobierno de Castilla-La Mancha con el medio ambiente, destacando que actualmente el 100% de la energía eléctrica consumida por los hospitales y centros de salud de la región proviene de energía renovable certificada.
Con esta medida, la región avanza significativamente en la transición energética, al mismo tiempo que mejora la eficiencia de sus centros sanitarios, y todo ello contribuye a un futuro más verde y sostenible para el sector público y para la salud de los ciudadanos.
Este contrato es solo el inicio de un proceso que, en palabras de la consejera, se continuará extendiendo “a toda la región”, consolidando a Castilla-La Mancha como un referente en la lucha contra el cambio climático y en la promoción de energías renovables dentro de sus infraestructuras públicas.








