Según la organización agraria, el aumento de las primas, que se ha producido desde octubre de 2024, ha llegado a encarecer las pólizas hasta un 200% en algunos casos, lo que está afectando gravemente a los ganaderos de la región.
Asaja solicita aumentar las ayudas al seguro ganadero de retirada de cadáveres en Castilla-La Mancha
La Asociación Agraria-Jóvenes Agricultores (Asaja) de Toledo ha solicitado al Gobierno de Castilla-La Mancha la convocatoria urgente de la Comisión Territorial de Seguros Agrarios para abordar el incremento de las pólizas de seguro que cubren los gastos de retirada y destrucción de cadáveres en las explotaciones ganaderas.
Desde que se produjo el cambio en la gestión de la recogida de cadáveres, el precio medio del seguro ha experimentado una subida del 30%, con casos extremos que superan el 150% de aumento. Un ejemplo claro es el de un ganadero de bovino con 327 vacas reproductoras, cuya póliza pasó de 691 euros a 1.663 euros, lo que supone un golpe económico considerable para la explotación.
Ante esta situación, Asaja ha instado al Ejecutivo regional a aumentar las subvenciones que actualmente cubren un porcentaje de las pólizas del seguro. Actualmente, el Gobierno de Castilla-La Mancha aporta un 5% en el caso del seguro para bovino y un 18% en las pólizas de ovino y caprino. Sin embargo, desde Asaja consideran que este porcentaje es insuficiente para hacer frente al elevado coste de las nuevas pólizas.
El seguro de retirada de cadáveres, también conocido como MER (Gestión de Materiales de Riesgo), es una herramienta esencial para garantizar el cumplimiento de las normativas sanitarias y de seguridad ganadera, permitiendo la correcta destrucción de los animales muertos. En este sentido, Asaja ha subrayado la importancia de convocar con urgencia la Comisión Territorial de Seguros Agrarios, que reúne a la Administración, las organizaciones agrarias, Agroseguro y Enesa, para tratar este asunto y buscar soluciones.
La organización agraria considera que un aumento en las ayudas del Gobierno de Castilla-La Mancha sería fundamental para aliviar la carga económica que supone este encarecimiento y garantizar la sostenibilidad de las explotaciones ganaderas de la región.