Este evento, en colaboración con la Universidad de Alcalá de Henares, estuvo dedicado a la figura histórica de Francisca de Pedraza, cuya sentencia judicial del siglo XVII marcó un antes y un después en la lucha contra la violencia de género.
La sentencia de Francisca de Pedraza: un referente en la lucha contra la violencia hacia las mujeres
El 26 de noviembre de 2024, la Sala Tragaluz del Teatro Buero Vallejo de Guadalajara acogió el acto de clausura de las actividades organizadas por el Ayuntamiento de Guadalajara con motivo del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
Una historia de valentía y justicia
La proyección del vídeo 399 años después, estrenado por la Universidad de Alcalá de Henares el año pasado, fue el punto de partida para un coloquio que profundizó en el caso de Francisca de Pedraza, quien fue víctima de violencia doméstica a manos de su marido, Jerónimo de Jaras. A través de una sentencia histórica dictada por el rector Álvaro de Ayala, Francisca consiguió la separación legal de su esposo, el retorno de su dote y la mitad de los bienes gananciales, además de una orden de alejamiento que prohibía tanto a su marido como a sus familiares acercarse a ella. Este fallo, considerado pionero en su tiempo, no solo protegió a la mujer maltratada, sino que sentó las bases para la futura lucha contra la violencia hacia las mujeres.
Un precedente judicial del siglo XVII
En el coloquio participaron destacados expertos como Miguel Rodríguez, catedrático de Derecho Eclesiástico del Estado, y Margarita Vallejo, vicerrectora de Postgrado, Formación Permanente y Extensión Universitaria. Rodríguez destacó la importancia de esta sentencia, considerando que, aunque se trataba de un caso de divorcio en el contexto del siglo XVII, fue un precedente en la lucha contra el maltrato, tanto en su fondo como en su forma. A pesar de la juventud del rector Ayala, este revocó tres sentencias previas de otros catedráticos y se comprometió con el caso de Francisca de Pedraza, una decisión que, según Rodríguez, refleja la actitud valiente y decidida del rector.
Un legado perdurable en el tiempo
A pesar de que han pasado más de 400 años desde la sentencia de Francisca de Pedraza, la violencia de género sigue siendo un problema social relevante, tal y como recordó Margarita Vallejo. La sentencia de Ayala, que no solo fue un acto de justicia, sino también de valentía y determinación, sigue siendo un referente en la lucha por los derechos de las mujeres y una muestra de cómo, incluso en épocas pasadas, la justicia puede ser una herramienta de cambio social. La memoria de Francisca de Pedraza, una mujer “fuerte y valiente”, continúa viva en Guadalajara, donde su nombre ha sido incluido en el callejero de la ciudad con una glorieta en su honor.
Este acto, que se cerró con un homenaje a todas las víctimas de la violencia de género, subraya el compromiso del Ayuntamiento de Guadalajara y de la Universidad de Alcalá de Henares en visibilizar y erradicar esta lacra social, reafirmando la importancia de la memoria histórica y el trabajo conjunto para lograr una sociedad más justa e igualitaria para las mujeres.