Álvaro Gonzalez
En la tercera corrida de la Feria Antigua 2024 en Guadalajara, se vivió una tarde triunfal para los tres toreros que, tras una serie de destacadas faenas, lograron salir en hombros por la puerta grande. La jornada taurina tuvo momentos de gran emoción y entrega por parte de los diestros, quienes se enfrentaron a ejemplares de las ganaderías Hermanos García Jiménez y El Pilar ante una plaza que registró tres cuartos de entrada.
El Fandi, encargado de abrir la tarde, tuvo un primer toro complicado desde el inicio. El astado mostró dificultades en el recibo con el capote, y durante el tercio de banderillas, donde “El Fandi” suele lucirse, no pudo destacar como en otras ocasiones. A pesar de su valentía y de intentar conectar con el público, los fallos en los pares de banderillas le pasaron factura. El toro, poco colaborador también en la faena de muleta, no le permitió desarrollar un toreo fluido, y el granadino, tras acortar la faena, terminó con el desagrado del público que le dedicó algunos pitos.
Sin embargo, en su segundo toro, “El Fandi” dio un giro total a su actuación. El ambiente en la plaza cambió desde el momento en que recibió al astado con dos largas cambiadas de rodillas, seguidas de ajustadas chicuelinas que arrancaron los primeros aplausos. En el tercio de banderillas, volvió a brillar, colocando cuatro pares con precisión y espectacularidad, lo que provocó el entusiasmo del público, que acompañó su labor con ovaciones. Con la muleta, aprovechó la nobleza del toro y consiguió ligar una serie de pases de gran calidad, mostrándose en su mejor versión. El torero culminó su faena con una estocada en todo lo alto, fulminante, que hizo caer al toro rápidamente. Esta gran actuación le permitió cortar dos orejas, lo que lo acercó una vez más a la ansiada puerta grande de Guadalajara.
Por su parte, Miguel Ángel Perera se enfrentó en su primer turno a un toro de la ganadería de El Pilar, que, a pesar de su gran presencia, no fue parte del encierro matutino. El extremeño lo recibió con unas verónicas que, aunque fueron breves, mostraron destellos de su arte. Con la muleta, Perera intentó conectar con el público desde las primeras tandas, especialmente por el pitón derecho, logrando pases con temple y técnica. A pesar de que no consiguió una respuesta contundente de los tendidos, dejó momentos de gran torería, demostrando su oficio y maestría. Tras un buen espadazo, cortó la primera oreja de la tarde.
En su segundo toro, Perera mostró una mayor conexión con el público. El toro, de gran presencia, presentó complicaciones en un principio, pero el extremeño supo entenderlo y adaptarse a sus condiciones. Destacó en las tandas por el pitón derecho, donde logró los mejores momentos de su faena, con pases largos y templados. Aunque por el pitón izquierdo el astado no mostró la misma calidad, embistiendo con más brusquedad, Perera mantuvo el control de la situación, lo que le permitió cerrar la faena con autoridad. Tras un espadazo que necesitó de un segundo intento, el torero fue premiado con dos orejas, completando así una tarde de éxito.
El gran triunfador de la tarde fue Víctor Hernández, quien, tras su destacado paso por la feria de Guadalajara en 2023, regresaba a este ruedo con grandes expectativas. En su primer toro, Hernández mostró su calidad desde el recibo con el capote, ejecutando verónicas con empaque que rápidamente conectaron con los tendidos. Con la muleta, realizó una faena vibrante, llena de temple y profundidad. Los naturales que ligó fueron especialmente aplaudidos, mostrando un toreo lleno de sentimiento y dominio. La faena fue creciendo en intensidad, con el público totalmente entregado y la música sonando de fondo, lo que creó un ambiente de pura emoción en la plaza. El torero culminó con una estocada certera que le valió las dos orejas y el reconocimiento del público.
En su segundo toro, Víctor Hernández mantuvo el nivel a pesar de que el astado presentó embestidas irregulares. Recibido nuevamente con verónicas de gran calidad, la faena de muleta fue un ejercicio de paciencia y maestría por parte del joven torero. A pesar de las dificultades que presentó el toro, Hernández supo sacar lo mejor del ejemplar, logrando momentos de gran calidad en su toreo. Destacó su capacidad para darle al toro el tiempo necesario entre tanda y tanda, lo que permitió que la faena tomara forma. Aunque el toro no facilitó el lucimiento en todo momento, el diestro demostró su madurez y serenidad. Cerró la faena con manoletinas ajustadas que arrancaron los “olés” del respetable, y tras una media estocada, cortó una oreja más, redondeando así su tarde.
Al final del festejo, El Fandi, Miguel Ángel Perera y Víctor Hernández salieron en hombros por la puerta grande, consagrando una tarde que será recordada por los aficionados de Guadalajara. La entrega de los tres toreros, sumada a la nobleza de algunos de los toros, permitió que la tarde alcanzara grandes momentos de emoción.
Ficha del festejo:
– El Fandi: Silencio y dos orejas.
– Miguel Ángel Perera: Silencio y dos orejas.
– Víctor Hernández: Dos orejas y una oreja.
Ganaderías: Hermanos García Jiménez y El Pilar. Tres cuartos de entrada.
Álvaro Gonzalez